La medicina interna es la especialidad de la medicina que se ocupa de la atención integral del adulto enfermo, enfocada al diagnóstico y tratamiento no quirúrgico de las enfermedades que afectan a sus órganos y sistemas internos así como a su prevención.
El médico internista es el medico clínico por excelencia, cuyo objetivo es la integración de síntomas y signos para llegar a diagnósticos certeros y tratamientos adecuados. En un equipo multidisciplinario es quien lleva el mando y coordina a los diferentes especialistas.
¿A qué se dedica un médico internista?
Estos médicos pueden intervenir en multitud de tratamientos. En términos generales, sus funciones son:
Tratamiento hospitalario de pacientes con diversas patologías: autoinmunes, metabólicas, sistémicas, etc.
Consultas externas.
Atención integral a pacientes que tienen un mayor riesgo vascular debido, por ejemplo, a enfermedades como hipertensión arterial o diabetes.
Asistencia a pacientes mayores con patologías como: diabetes, insuficiencia cardíaca, etc.
Atención a pacientes con patologías infecciosas.
Estudios analíticos o radiológicos.
Seguimiento a pacientes con enfermedades sistemáticas.